¿Quieres mantener la energía durante el día?
Una de las mejores formas de empezar a alimentarnos de forma saludable es implementar una dieta saludable en todos los sentidos (entendiendo dieta como modelo de alimentación flexible en el que nos nutrimos bajo nuestras necesidades pero sin seguir una pauta tremendamente estricta o desconectada de nuestras apetencias y necesidades en cada momento), de tal manera que una de las herramientas que podemos implementar es disfrutar de unos snacks o comidas entre horas verdaderamente satisfactorias y saciantes. Por ello, en este artículo te proporcionaremos varias ideas de tentempiés saludables que nos permiten nutrirnos también entre horas, así como mantenernos saciados durante más tiempo.
¿Por qué pueden ser interesantes los snacks saludables?
Los snacks saludables pueden ser nuestros grandes aliados para mantenernos enérgicos y con un estado de ánimo más estable durante el día, hecho que nos proporciona un mayor bienestar y satisfacción con nuestro estilo de vida. Nos brindan la oportunidad de mejorar nuestra concentración, mantener unos niveles de glucosa estables, algo que se refleja en una mayor regularidad de necesidad de ingesta y por consiguiente, una ingesta más relajada y pausada en las comidas principales, asegurándonos de una mayor probabilidad de realizar una masticación y digestión más óptimas.
Opciones de snacks saludables para el día a día:
- Macedonia de frutas frescas y de temporada: la fruta casi siempre es nuestra gran aliada, y en estos casos aún más. De hecho, en ocasiones nos encontramos con que nos cuesta meterla en nuestra alimentación diaria, por lo que introducirla entre horas puede ser muy buena opción.
- Manzana con mantequilla de cacahuete y canela: esta es una mezcla que suele triunfar, ya no solo por su gran versatilidad, si no por la combinación de texturas y nutrientes tan interesantes.
- Semillas y frutos secos: tenemos una gran variedad a elegir, pero lo ideal es disfrutar de las diferentes vitaminas, minerales y demás nutrientes que nos ofrece cada uno. Por ello, lo ideal es consumir un puñado de algún mix ya elaborado, como podemos encontrar en muchos supermercados. Lo mismo sucede con los mix de semillas que nos podemos encontrar ya mezclados, repletos de nutrientes y que nos pueden aportan esa satisfacción y saciedad que nos puede resultar muy útiles y nutritivos entre horas.
- Palitos de zanahoria con hummus o guacamole: como siempre recordamos, cuanto más casero, mejor. No obstante, en algunos casos podemos comprar la zanahoria ya cortada para que nos resulte mucho más práctico el consumo de estos alimentos. Además, la masticación extra que requieren estos alimentos con una textura en crudo, nos proporciona una mayor sensación de saciedad, muy beneficioso en aquellos casos en los que tengamos unas señales de hambre – saciedad más alteradas y que, por tanto, nos interese regular.
- “Nachos” caseros con hummus: los nachos industriales no suelen ser más nutritivos, y a pesar de que para un momento de ocio y disfrute puntual puedan ser muy prácticos, si los queremos llevar al trabajo de forma regular, lo mejor sería hacerlos en casa. Para ello, necesitaríamos el horno o la airfryer. Generalmente en la airfryer es bastante más rápido y cómodo, pero cada persona con sus recursos. La idea sería escoger las tortillas de trigo o avena clásicas (a ser posible las que mejores ingredientes tengan) y cortarlas en triángulos consiguiendo la típica forma de nacho comercial. Cuando ya tengamos la cantidad deseada de nachos ya cortados, le añadiremos un chorrito de aceite de oliva virgen extra, ajo en polvo, pimentón dulce y una pizca de sal. Una vez bien impregnados de este mejunge, los introduciremos en la airfryer durante 5 minutos a 200 grados. En caso de hacerlo en el horno, los dejaremos durante 15 minutos a 165 grados. Dejar enfriar bien separados para que no pierdan el punto óptimo de textura y listo. En este caso hemos planteado dipear con hummus de remolacha, pero podemos combinarlo con la salsa saludable que más disfrutemos y que más sencillo nos resulte transportar, como bien podría ser también el hummus clásico, un poco de ricotta o aquella que se nos ocurra con ingredientes nutritivos. Metemos ambas cosas en un tupper y en el bolso o mochila que llevemos en el día a día.
- Huevos duros o guisados: los huevos entran dentro de lo que podríamos considerar alimentos de emergencia, pues podríamos hacer casi cualquier receta con ellos. En este caso, los huevos duros pueden ser un snack o media mañana súper saciante, nutritivo y además, super fácil de cocinar y transportar. Quizás no sea el tentempié más clásico pero casi que seguro de los más nutritivos a nivel proporcional.
- Granola casera: snack ideal para mezclar con kéfir, yogur natural o incluso un mini brick de leche entera o la bebida vegetal que más nos guste. Lo ideal es hacer bastante cantidad e ir repartiendo para los diferentes snacks que consideremos oportunos durante la semana. Para hacerla necesitamos 3 tazas de avena, a ser posible, integral, 1 puñado de frutos secos picados, un puñado de semillas variadas, un puñado de coco rallado al gusto, 1 chorrito de aceite de oliva virgen extra, 1 cucharadita de canela, un toque de sal y un puñado de pasas, manzana deshidratada y arándanos deshidratados. Como ingrediente extra, podemos incluir un chorro de miel, que aunque no sea el ingrediente más saludable, le puede aportar un sabor que nos hará disfrutar más de esta granola, mucho más saludable que muchas que podríamos encontrar en el supermercado.
- Galletas caseras de plátano: otro de los snacks más típicos suelen ser las galletas ultra procesadas, en todas sus facetas. Bien sea por su escasa necesidad de preparación por parte del consumidor, por su gran variedad y palatabilidad o por su precio. Sin embargo, podemos hacer las nuestras propias con muy pocos ingredientes, y también con muy poca necesidad de preparación. Un ejemplo de una receta muy sencilla y rápida serían las clásicas galletas de plátano con avena, frutos secos y chocolate negro. Como ingrediente opcional, la canela en recetas dulces también suele ser maravillosa. Una vez tengamos dicha mezcla elaborada, la dividimos en pequeños montones con forma de galleta y las introducimos en la airfryer durante 12 minutos a unos 180 grados. En caso de realizarlo en horno, las cocinaremos durante unos 20 – 25 minutos a unos 180 – 200 grados, por supuesto, siempre según el grosor de la masa y la potencia de nuestros respectivos electrodomésticos.
En definitiva, los snacks saludables podrían ser considerados una parte fundamental de una alimentación equilibrada, contribuyendo al mantenimiento de una composición corporal saludable y, probablemente, ayudándote a cumplir tus objetivos de salud y bienestar físico y mental. Cada pequeña mejora cuenta, y por supuesto, teniendo en cuenta que cada estilo de vida es un mundo, y lo que es saludable para una persona puede no serlo tantísimo para otra.
En definitiva, los snacks saludables podrían ser considerados una parte fundamental de una alimentación equilibrada, contribuyendo al mantenimiento de una composición corporal saludable y, probablemente, ayudándote a cumplir tus objetivos de salud y bienestar físico y mental. Cada pequeña mejora cuenta, y por supuesto, teniendo en cuenta que cada estilo de vida es un mundo, y lo que es saludable para una persona puede no serlo tantísimo para otra.